Hay Veces que sueño que las sarigueñas me regalan una máquina del tiempo, y entonces comienzo a buscarte entre todas mis vidas, hasta encontrar un carrusel decadente donde compartimos nuestros abismos. En ese instante despierto y te encuentro jugetendo con las arañas, con mi pudor y el silencio, te invito a dormir entre mis sueños, pero tu que sabes hablar con las con las tazas, me adviertes que tenga cuidado con los cocodrilos.
DIDIER
De pronto me parece como la letra de una canción;)
ResponderEliminarEsta rifado!!
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ResponderEliminarEfectivamente, faltan unas chelas y un par de horas, para generarle una canción. Por supuesto tambien el Armendariz.
ResponderEliminarA mí ya me encanta como escribes
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